En octubre del año pasado,
cuando denunciábamos el travesticidio de Diana Sacayan, recordábamos las
palabras de Lohana Berkins, militante travesti, sobre la belleza T.
 |
| Amancay Diana Sacayan y Lohana Berkins |
Hace unos días nos
despertamos con la triste noticia de que esta compañera, Lohana, nos había
dejado.
Nos ha dejado su cuerpo,
pero no su lucha, sus enseñanzas, ni sus conquistas. Mientras haya una sola
travesti en algún rincón del mundo que sea discriminada, acosada, abusada,
golpeada o asesinada, Lohana estará presente, diciendo:
¡No me van a doblegar jamás!
Y a Lohana nunca pudieron
doblegarla. Ni la expulsión de su casa por parte de su padre cuando tenía 13
años, ni el llegar a Buenos Aires sola y sin nada, ni la dura vida de la
prostitución, ni los calabozos, ni los abusos policiales, ni la violencia
institucional, ni el desprecio, ni los golpes, ni el patriarcado… nada pudo con
ella. Nada pudo con su lucha, con su alegría, con su amor.
Porque como ella misma dijo:
“En un mundo de gusanos capitalistas hay que tener coraje para ser
mariposa”. Y ella tuvo ese coraje.
Loahana contaba que sus amigas que vinieron
de su Salta natal después de ella, todas murieron. Todas muertes evitables. Por
eso decía “La muerte es una cosa viva en
nosotras”. Y esa muerte hará que Lohana viva por siempre, porque nunca muere
quien se recuerda. Y volverá, en su legado, y será millones.
Hace ya unos días que Lohana
estaba ingresada en el hospital, y a su alrededor se formó una cadena de
solidaridad y amor impresionante. Porque ella era amor, y eso generaba. El día anterior a su muerte, mandó un mensaje
a través de otra compañera, para agradecer ese amor del que se sentía rodeada:
« Muchos son los triunfos
que obtuvimos en estos años. Ahora es tiempo de resistir, de luchar por su
continuidad. El tiempo de la revolución es ahora, porque a la cárcel no
volvemos nunca más. Estoy convencida de que el motor de cambio es el amor. El
amor que nos negaron es nuestro impulso para cambiar el mundo. Todos los golpes
y el desprecio que sufrí, no se comparan con el amor infinito que me rodea en
estos momentos. Furia Travesti Siempre. Un abrazo »
Hasta siempre, compañera.
La lucha continúa.
Hasta la Victoria.
